Cerca de 12 barcos petroleros están a la deriva.
Las sanciones impuestas a Venezuela por el gobierno de Estados Unidos han bloqueado la comercialización del crudo proveniente de la nación sudamericana.
La crisis política en Venezuela sigue arrojando efectos contraproducentes para el régimen de Nicolás Maduro, el cual ha sumado más detractores que adeptos. Entre los primeros se encuentra Estados Unidos, quien como parte de la presión contra el mandatario ha impuesto sanciones que afectan la comercialización del petróleo del país sudamericano.
Estas medidas restrictivas ordenadas por el gobierno de Donald Trump han ocasionado que el crudo venezolano no pueda ser movido en el mercado de forma normal. Esto obedece a que los activos de la empresa estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) fueron congelados en Estados Unidos. Además, se ha elevado el costo de envío de productos combustibles provenientes de la Unión Americana que tienen como destino el país sudamericano. Dentro de los productos bloqueados se encuentran los diluyentes, necesarios para procesar el grueso y pesado crudo venezolano.
Tal situación ha provocado que aproximadamente siete millones de barriles de petróleo de Venezuela se encuentren varados en el mar, navegando sin destino por las aguas del caribe y el Golfo de México. Esto no solo impacta a Venezuela, quien ve disminuidos sus ingresos en medio de una crisis humanitaria, sino también a los compradores de crudo en Estados Unidos, quienes ahora ven en Canadá una opción para abastecerse, sin embargo, la producción del vecino norteño es insuficiente para satisfacer su demanda.
Cabe señalar que el petróleo venezolano difícil de procesar, en el continente americano solo las refinerías de Estados Unidos pueden procesarlo. Esta condición dificulta aún más la comercialización del crudo varado, pues pocos países en el mundo cuentan con el equipo necesario. India y China son una opción, no obstante, el costo para transportarlo debido a la distancia es el mayor obstáculo.
ONU solicita despolitizar la ayuda humanitaria
Ante el desabasto que existe en Venezuela de productos de primera necesidad, el líder opositor y autonombrado presidente interino, Juan Guaidó, solicitó ayuda humanitaria a la comunidad internacional, sin embargo, Nicolás Maduro señaló que no es necesario, por lo que ha entorpecido la llegada de la asistencia humanitaria.
Hace unos días el presidente constitucional de Venezuela mandó bloquear la carretera que conecta a Venezuela y Colombia, con la intención de no dejar pasar los alimentos y medicinas enviadas. Ante este hecho la ONU ha mostrado su inconformidad y le ha mandado un mensaje a Maduro.
Stephane Dujarric, vocero del secretario general de la ONU, externó: «Es importante que la ayuda humanitaria sea despolitizada y que las necesidades de la gente se aborden en términos de cuándo y cómo se usará (…) la asistencia humanitaria debe llevarse a cabo conforme a los principios de neutralidad, imparcialidad e independencia, por lo que debe ser aparte de la política o la acción militar»
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