Alto Nivel - Reformas que crean seguridad y miedos
Alto Nivel - Reformas que crean seguridad y miedos

Los 32 congresos locales aprobaron la Guardia Nacional

Falta que la propuesta pase por ambas Cámaras para que sea promulgada por el presidente

Ocurrió lo que tanto se temía pero a la vez se celebraba: la Guardia Nacional fue aprobada en los 32 Congresos locales, esto luego de que Michoacán y Yucatán –los dos últimos estados que faltaban en dar su visto bueno- avalaran la reforma constitucional.

Y ya sea por mera imagen o porque en verdad se busque dar más «legitimidad» a esto, aunque la Guardia pudo haber sido aprobada desde la semana pasada, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que lo mejor sería esperar a que todos los estados se dijeran de acuerdo para que no hubiera lugar a dudas de que todo se hizo legalmente.

Ahora que Michoacán y Yucatán –este último con 22 votos a favor y tres en contra- han aprobado que se realicen cambios en la constitución para crear esta Guardia, el Congreso de la Unión recibirá las notificaciones de los congresos locales para que el tema pase a la Cámara de Diputados, al Senado, y luego la reforma sea enviada a AMLO para su promulgación.

Ahora, después de que esto suceda es cuando comenzará, como dirían por allí, «lo verdadero bueno», pues una vez que la Guardia Nacional sea constitucional, se tendrán que diseñar y aprobar leyes secundarias en lo concerniente a temas como detenciones y uso de la fuerza que esta nueva autoridad podrá aplicar con tal de mantener la seguridad en el país.

En pocas palabras, la Guardia Nacional le permitirá al presidente tener a su disposición a la Fuerza Armada del país de manera permanente para llevar a cabo tareas de seguridad pública, pero no sólo eso, sino que contará con un respaldo constitucional para ello durante los próximos cinco años.

Por otro lado, si bien el priista Felipe Cervera Hernández comentó, muy seguro de sí, que «el presidente pidió una Guardia Nacional y el respaldo de los diputados del país; aquí se los damos», sólo esperemos que esta alegría y seguridad no pasen pronto, pues cabe recordar que con este reforma el ejército ahora podrá hacer cargo de problemas de seguridad pública y no sólo de peligros o emergencias nacionales.

De aquí la importancia sobre las modificaciones que se lleven a cabo en la Ley de Registro de Detenidos, Ley del Uso de la Fuerza y la Ley Orgánica de la propia Guardia Nacional, pues es allí donde nos daremos cuánta sobre las libertades pero también limitantes (si es que las hay) que esta autoridad tendrá con la ciudadanía.

Por supuesto, con esto no queremos decir que el Ejército pasará a convertirse automáticamente en una especia de «monstruo» de impunidad y cometerá actos atroces con toda libertad…pero bueno, tomando en cuenta diversos hechos del pasado, tampoco es que estos temores sean injustificados.

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