Niega SE que Pemex se desentienda de las aguas profundas
La refinería de Dos Bocas contribuirá a hacer frente a los impactos negativos que afecten la economía mexicana, derivados de su dependencia de las importaciones de crudo.
La titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle, descartó que la dependencia a su cargo esté buscando modificar el presupuesto solicitado al Gobierno federal para el ejercicio fiscal del próximo año, aun con la incertidumbre que se vive en el contexto internacional por los ataques perpetrados contra dos refinerías de Arabia Saudita.
Aunque la funcionaria federal reconoció que el incremento en los precios internacionales del crudo (49 dólares por barril de petróleo mexicano) son temporales, afirmó que la construcción de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, contribuirá a moderar los impactos negativos que se produzcan en la economía nacional como consecuencia del aumento en los costos por barril en otras zonas del mundo.
Nahle recordó que el país depende en demasía de las importaciones de petróleo, por lo que una nueva refinería, además del reacondicionamiento de las ya existentes, ayudará a fortalecer el sector energético del país. En ese sentido informó que, al cierre de 2019, las refinerías del país estarán operando a un 60 por ciento de su capacidad, gracias a los 12 mil 500 millones de dólares destinados a la compra de refacciones y materiales para su rehabilitación.
Contrario a las declaraciones de Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, quien aseguró que el sector petroquímico y la exploración de aguas profundas correrá a cargo del sector privado, la secretaria de Energía descartó que esto vaya a suceder de tal manera: «Los 107 contratos que se asignaron ahí están, estamos esperando que produzcan, que den resultados».
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