La mayoría de los dreamers son de origen mexicano
Corte Suprema de EUA analiza la situación de 600 mil dreamers

La mayoría de los dreamers son de origen mexicano

Desde 2017 los beneficiarios del DACA se encuentran en un limbo jurídico que podría decidirse hasta el verano de 2020.

La Corte Suprema de Estados Unidos decidirá el futuro de más de 600 mil dreamers incorporados al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), el cual entró en vigor en 2012 pero fue cancelado cinco años después por el actual presidente norteamericano Donald Trump.

Aunque el fallo de la Corte Suprema podría producirse hasta el verano de 2020 —pocos días antes de realizarse los comicios presidenciales—, fue este martes 12 de noviembre cuando nueve jueces analizaron los casos de algunos beneficiarios del programa: «Yo espero que los jueces escuchen nuestro caso y entiendan que somos humanos, que tenemos casas, familias», explicó Carolina, una de las demandantes que impide que el DACA haya sido cancelado de manera definitiva.

Carolina llegó a EUA, desde Costa Rica, cuando solo tenía 12 años de edad, sin embargo, tras la decisión del presidente Trump de cancelar el programa, tanto ella como miles de beneficiarios cayeron en un limbo jurídico: sin beneficios y a la espera de que la Corte Suprema resuelva la decisión sobre el futuro de los dreamers.

Cabe recordar que fue el expresidente Barak Obama el principal impulsor del DACA, el cual protege a los hijos de migrantes de ser deportados a sus países de origen —quienes en muchas ocasiones ni siquiera lo recuerdan o conocen—, además de ofrecerles oportunidades de estudio, trabajo y una vida social adecuada dentro de la unión americana.

Sin embargo, para el presidente Trump, varios de los que en su momento fueron beneficiarios por el DACA, ya no son tan jóvenes, «están lejos de ser ángeles. Algunos son criminales muy duros».

Es preciso señalar que la principal estrategia del mandatario norteamericano para echar abajo el programa de Obama radica en las propias declaraciones de su predecesor, quien afirmó no tener «derecho legal» para firmar la orden (DACA), per que lo haría de todos modos.

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