La oposición rusa afirma que se trata de un intento para perpetrarse en el poder, tal como ocurrió en 2008, cuando intercambió puesto con su entonces primer ministro.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, presentó una serie de reformas constitucionales con miras a fortalecer los poderes del Parlamento, lo que causó la renuncia de todo su gabinete de Gobierno, encabezado por el primer ministro Dimitri Medvedev.
«Nosotros, como Gobierno de la Federación de Rusia, tenemos que dar al presidente de nuestro país los medios de tomar todas las medidas que se imponen. Es por ello (…) que el Gobierno en su composición actual presenta su dimisión», indicó el ministro en una entrevista.
Entre los principales cambios anunciados por Putin se encuentra la participación de la Duma en el proceso de elección del primer ministro, viceministros y miembros del Ejecutivo —actualmente solo se dedicaba a dar su visto bueno—, «El jefe del Kremlin no puede rechazarlos, aunque seguirá conservando el derecho a destituir al Gobierno».
«Rusia debe seguir siendo una fuerte república presidencialista», destacó el mandatario al tiempo que se dijo a favor de realizar cambios en la Constitución para limitar a dos el número de periodos que cada presidente pueda permanecer en el cargo. Actualmente el presidente de Rusia está obligado a dejar el puesto luego de dos mandatos, pero nada le impide regresar posteriormente al Kremlin.
Algunos de los principales detractores de Putin confirmaron que dichos cambios están relacionados con el interés del mandatario para convertirse en primer ministro a partir de 2024, una situación similar a la ocurrida en 2008.
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