El pasado miércoles, 24 personas fueron asesinadas y otras siete resultaron heridas luego de que varios hombres armados irrumpieron en un centro de rehabilitación no registrado y dispararon contra ellos. El ataque se llevó a cabo en Irapuato, informó la policía del estado de Guanajuato.
«Tenemos el reporte de que llegaron sujetos (armados) en un vehículo de color rojo, no se saben mayores datos. El informe preliminar que tenemos es de 24 personas sin vida y siete lesionados», dijo a la prensa el secretario de Seguridad Pública de Irapuato, Pedro Cortés.
Según el reporte, los sujetos armados «se metieron al lugar, los pusieron en el suelo y les dispararon».
El gobernador del estado, Diego Sinhue, indicó que hasta el momento no hay un móvil concreto, pero aparentemente hay organizaciones de narcotraficantes involucradas.
“Mi compromiso personal e institucional se encuentra con las víctimas de quien hoy perdieron la vida o fueron heridas en este cobarde ataque. Estamos trabajando y no descansaremos hasta devolver la tranquilidad a Guanajuato. Tenemos que salir adelante”, escribió el gobernador en su Twitter.
El Cártel Jalisco Nueva Generación y una pandilla local se disputan el territorio de Guanajuato, lo que lo ha convertido en el estado más violento de México.
Apenas el domingo pasado fue asesinado en el mismo estado el abogado que defendió a la familia de José Antonio Yépez Ortiz, alias El Marro, líder del cartel local, quien se ha convertido en uno de los delincuentes más buscados del país.
La madre de El Marro, identificada como María Eva N. había sido liberada ese día después de que no se encontraran evidencias en su contra para vincularla a proceso. Tras la detención de su familiar, el líder del cártel prometió venganza y graves ataques en Guanajuato.
Respecto a esto, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que estos ataques «son agresiones entre ellos en la mayoría de las casos. Creció mucho el problema, lo dejaron crecer, hay que ver si no hay contubernio»
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