Las recientes protestas iniciadas el pasado domingo en San Antonio de los Baños han puesto en el ojo del Huracán a Cuba.
Algunos de los manifestantes expresaron que todo inició por la escasez de comida, medicamentos y productos básicos, así como por la creciente inflación y apagones recurrentes.
A inicios de años el Gobierno propuso un nuevo paquete de reformas económicas que lograron aumentar los salarios pero también los precios,
El gobierno de Miguel Díaz-Canel promovió, desde el año pasado, la creación de tiendas en monedas libremente convertibles, en las que comenzaron a vender algunos alimentos y productos de primera necesidad que se pagan en divisas diferentes a las de salarios de la mayoría de cubanos.
Asimismo, el mes pasado, el Gobierno decidió dejar de aceptar temporalmente dólares en efectivo (principal divisa que recibe la isla en remesas). Esta medida es considerada como la más restrictiva impuesta sobre el dólar desde que estuvo penalizada durante la administración de Fidel Castro.
Otro aspecto que llevó al estallido de las manifestaciones fue que los medicamentos básicos comenzaron a escasear tanto en farmacias como en hospitales, cubanos aseguran que en algunos centros médicos no hay ni aspirinas para bajar la fiebre.
Díaz-Canel ha asegurado que dichas situaciones se deben al embargo o bloqueo recrudecido que tienen los Estados Unidos para con Cuba, aunado a la situación sanitaria que se vive en el mundo entero.
De igual manera, las tensiones aumentan por la represión en las manifestaciones, el incremento de éstas y el llamado del presidente a revolucionarios a confrontación.
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