Autoridades de la Unión Europea informaron que el uso de cubrebocas en aeropuertos y vuelos dejará de ser obligatorio a partir de la próxima semana. Esto debido a la disminución de contagios de la COVID-19 en el continente gracias a las vacunas y a la inmunidad natural.
La decisión fue tomada por la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA, por sus siglas en inglés) y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades. Se espera que la elección sea “un gran paso adelante en la normalización de los viajes aéreos”.
La nueva recomendación “tiene en cuenta los últimos avances de la pandemia, en especial los niveles de vacunación e inmunidad adquirida de forma natural, y el consiguiente levantamiento de las restricciones en un creciente número de naciones europeas”, señalaron ambas agencias en un comunicado.
Aunque la mascarilla no será obligatoria, el director ejecutivo de la EASA, Patrick Ky, pidió a los pasajeros ser empáticos con las otras personas y respetar la elección de cada una sobre su uso o no. Por otro lado, también comentó que si “un pasajero que esté tosiendo y estornudando debería considerar seriamente el uso de mascarilla, para la tranquilidad de los que están sentados cerca”.
Asimismo, si bien la medida entrará en vigor el 16 de mayo, su aplicación podría variar según la aerolínea y de si parten o aterrizan en lugares con reglas diferentes.
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